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Conóceme...

¡Hola! Soy Ana, la creadora de VITA. Me caracterizo por ser una persona apasionada en todo lo que hago, le pongo mucho empeño. La cocina siempre ha sido uno de mis primeros amores desde muy pequeña...Te invito a sonreirle a la luz de la vida en este espacio...


Trascender significa que tu alimentación debe ser medicina para tu cuerpo.

Lo que consumes no es exactamente consciente (lo que mi cuerpo necesita).

Si tienes una alimentación consciente, tu estilo de vida lo es. Por lo tanto, no será necesario restringirse de ciertas comidas, porque tu consciencia ya lo estará aplicando en el acto de comprar y comer.


[Este mensaje es algo que quiero llevarle a cada persona con mi comida y a todos los que me leen...]


Mis antecedentes...

Desde niña, siempre tuve esa curiosidad e interés por el arte culinario y prepararme mis propios alimentos. De hecho, durante mi crianza tuve mucha influencia de mis abuelas, bisabuela, mamá y tías mostrándome sus técnicas de cocina en donde colocaban su sasón, su energía y su amor. Esto me marcó mucho, ya que todas tenían en común la preparación de comida artesana (hecha por ellas mismas), incluso teníamos animales específicamente para nuestro consumo (criados y alimentados por nosotros) al igual que la siembra, para su cosecha posterior. Muy poco consumíamos fuera de casa, por lo tanto nuestra alimentación no tenía conservantes y era bastante orgánica. A medida que fui creciendo, era muy fácil prepararme mis comidas (desayunos, meriendas y almuerzos), incluso siempre preferí lo más nutritivo (frutas y vegetales), a las chucherías (frituras, burundangas, etc.)


Adicional a esta alimentación, durante mucho tiempo de mi niñez y adolescencia practiqué Ballet y otros deportes como natación, ya que tengo hiperflexibilidad, y esto me ayudaba a estar saludable. En el ballet, no tuve problemas con el peso, sin embargo, siempre fue algo muy marcado con muchas de mis compañeras. El repetirnos todos los días mete la barriga, postura erguida, etc. formó parte de mi crecimiento como mujer.


Más adelante, en la universidad, decido estudiar Administración de Empresas Hoteleras, en donde tuve la oportunidad de tener profesores de otros países, de la cadena Glion (Escuela Hotelera, en Suiza). Por lo tanto, la educación era muy profesional, inclusive dimos clases de gastronomía francesa (Le Cordon Bleu - Instituto en Educación Superior en Hostelería, en Francia). Dentro de la carrera el método de enseñanza era combinar la Hotelería y artes culinarias. Además teníamos que acumular un mínimo de horas de trabajo en cocina, requisito para graduarse y realizar también práctica profesional, la cuál tuve la experiencia de irme con un programa que existía a Disney World, fue una experiencia increíble, que recuerdo con mucho cariño, porque también trabajaba en la cocina en mis días libres).


Al regresar a Panamá, empecé a laborar en diferentes hoteles en la sección administrativa y operativa, aunque en muchas ocasiones, por algún motivo terminaba en la cocina metida curiosiando. Todo esto me llevo a tomar un técnico en panadería y repostería, y entonces fue cuando en el 2015, decidí atreverme a empezar un pequeño emprendimiento de venta dulces de cumpleaños (era conocida como "El Cocinaito", donde también hacía catering para eventos. Sin embargo, no duro mucho tiempo, porque implicaba muchas cosas que no dominaba administrativamente. Emprender implica muchas cosas que puede resultar muy fácil para la vista de las personas externas, pero pueden pasar años para aterrizar ideas, a veces reinvertarse y en mi caso tuvieron que pasar algunos años para reflexionar sobre mis tantas ideas, tomar más experiencia en cocina, en otras áreas que no dominaba, etc. El mejor consejo que puedo decir es "Tómate tu tiempo para crear, sin apuro". Es tu tiempo y espacio que debe ser respetado; y en cuanto puedas y decidas nuevamente, es cuestión de lanzarse al vacío", y sí por supuesto que existen miedos (miedo al fracaso, miedo a la escasez, miedos siempre van a existir, pero que esos miedos no sean un impedimento para atreverte a hacerlo, a ser diferente, a equivocarte, a no rendirse.

Buscamos siempre la perfección en todo, cuando no tenemos que ser perfectos para hacer algo que lo bonito es que nuestra energía queda depositada allí y mucha gente puede ser beneficiada en su vida con ese conocimiento que le compartes.

Los procesos no son lineales, en todo siempre hay altos y bajos, lo importante es la constancia y siempre seguir. El mantener un efoque siempre mirando hacia adelante. Los momentos de crisis que nos incomodan a todos, son necesarios para aprender y crecer en todos los sentidos.



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